Existen diferentes tipos de pistas de pádel cuyas características influyen en la dinámica del juego. Además, ofrecen experiencias y rendimientos variados a los jugadores. Conocer sus principales características te permitirá aprovecharlas para desarrollar distintas estrategias y explotar mejor las potencialidades de cada una, reduciendo así sus posibles limitaciones. Por ello, vamos a explorar algunas de las que se pueden encontrar, así como sus propiedades particulares.  

¿Cuántos tipos de pistas de pádel hay? 

Las medidas, materiales y cerramientos de las pistas de pádel vienen especificados por el reglamento de la Federación Internacional de Pádel. Aunque las dimensiones oficiales están unificadas y no hay margen para innovaciones, lo cierto es que, en cuanto a los componentes de fabricación, o los muros, sí que ofrecen diferentes posibilidades. 

Por ejemplo, el material habitual para el suelo ha sido el cemento, el hormigón poroso, la resina sintética y, desde hace unos años, el césped artificial, una opción que se ha convertido en la estándar en el circuito profesional.  

Cada tipo requiere un tipo de mantenimiento, proporciona determinada durabilidad y, por supuesto, brinda un comportamiento distinto de la bola, además de presentar variaciones que influyen en la movilidad de los jugadores. Es especialmente significativa la fabricación de la superficie de la pista, ya que determina la forma de juego, dando lugar a un juego más rápido o lento según el compuesto principal. 

Tipos de pistas de pádel según el suelo  

Estos son los diferentes tipos de pistas de pádel según el suelo con el que estén hechos.

Pistas de cemento u hormigón poroso 

Las instalaciones con uno u otro material ofrecen características similares. La principal es que son muy duraderas y requieren un menor mantenimiento, de ahí que fueran las elegidas hace años cuando el pádel comenzaba a aflorar en nuestro país. Además, la principal diferencia entre ambos es que el hormigón poroso drena mucho mejor el agua, algo crucial en aquellas zonas donde la lluvia es algo habitual. 

Por otro lado, en estas pistas el rebote de la pelota es mayor, lo que, por un lado, hace que el juego sea más dinámico y rápido, y por otro, supone tener un menor control sobre la bola. Una de sus principales desventajas es que la amortiguación es mucho menor. Esto hace que los juegos largos sean más exigentes y provoquen que las articulaciones de los jugadores sufran más. 

Pistas de césped artificial 

Se han vuelto uno de los suelos preferidos por muchos aficionados al pádel debido a la buena amortiguación que brindan. Resisten bien al tiempo, pero requieren mayor labor de conservación para mantener la arena sobre la que se sostienen bien distribuida y nivelada. 

Otro de sus aspectos destacados es que, además de cuidar más las articulaciones en comparación con las de cemento, permiten la realización de ciertos deslizamientos que pueden ser útiles en la ejecución de ciertos movimientos. También generan un buen agarre y, en contraste con las anteriores, propician un juego algo más lento, estable y predecible. 

Pistas de resina sintética 

Una de las alternativas más caras, por lo que es la que se suele ver en los torneos de los circuitos profesionales. La principal virtud de este tipo de superficies es el buen rebote de la pelota, pero, eso sí, se trata de uno rápido, lo que hace que el juego sea bastante dinámico. Sin embargo, es posible cambiar el ritmo según el tipo de golpe. Por eso son apreciadas por jugadores experimentados. 

Igualmente, son cómodas en sesiones largas porque ofrecen un buen agarre y amortiguación. 

Tipos de pista pádel según el cerramiento 

Otro de los grandes protagonistas del pádel son sus paredes. De nuevo, las alturas y materiales permitidos en las paredes de las pistas de pádel están reglamentados por la FIP y, en particular, se permiten dos: el cristal y los muros de obra. 

• Paredes de cristal: Son las que se están volviendo cada vez más comunes. Lo positivo es que generan un buen rebote de la bola, de ahí que sean la opción preferida por muchos. 

• Paredes de muro u obra: Su principal ventaja es que aíslan mucho más el sonido que las de cristal, por lo que favorecen la concentración. Además, la humedad afecta mucho menos al juego, algo que perjudica mucho más a las de cristal; la pelota suele tender a resbalarse cuando la superficie es muy húmeda. 

• Pistas panorámicas: Son una versión de las de cristal, pero cuyas paredes son acristaladas, de forma que se ve todo lo que ocurre en la pista. Precisamente se popularizaron por su gran visibilidad en las retransmisiones en directo. Actualmente, también son el modelo escogido para pistas de interior. 

Vistas las diferentes características y variaciones de los tipos de pistas de pádel, muchos tendrán ya sus propias preferencias. Sin embargo, conocer cada una de sus propiedades hará que sea más fácil tomar ventaja cuando te encuentres con alguna de ellas, lo que beneficiará sin duda tu rendimiento.